Por: Andrés Juárez
Alumno de Ciencias de la Comunicación UCEM
Colaborador del Laboratorio de Periodismo UCEM
Para los mexicanos el fútbol es más que un simple deporte. Como en otros lugares, forma parte de la cultura popular en nuestro país e incluso se podría considerar por muchos como una religión.
No es de sorprenderse que este deporte sea el de más audiencia en México, pues según datos de ESPN y la encuesta aplicada por el GCE (Gabinete de Comunicación Estratégica) es el más practicado y el más visto por diferentes medios de comunicación como la televisión, la radio y más recientemente a través de las redes sociales.
La comunicación del deporte tiene una influencia importante ya que la información del fútbol llega a nosotros por diferentes medios. Un ejemplo claro de ello: La Televisión, que es el medio más popular para ver los partidos además de escuchar las opiniones de expertos y enterarse de noticias relevantes al deporte.
El mercantilismo que surje gracias a la cultura del fútbol, es otro ejemplo de comunicación, ya que supone un negocio que cubre una necesidad de expresión y de identidad que los fanáticos demuestran al consumir diferentes productos para compartir su pasión por este deporte y por el equipo o el judaror al que admiran. Actualmente es normal ver a una persona con la camiseta con los colores de su equipo o ver jugar a los jóvenes con un balón de las Chivas o del América.
El fútbol representa no sólo una forma de entretenimiento, que es una de las funciones de la comunicación, sino también una actividad deportiva que ayuda a desarrollar una formación integral, personal y profesional, integrando valores que los medios de comunicación logran difundir como el compañerismo, el respeto, el trabajo en equipo, la confianza, el desarrollo físico, entre otros.
Para muchas personas, este deporte llega a ser una gran fuente de motivación, debido a que ayuda a fijarse metas y aspiraciones para lograr lo que se proponen y no se den por vencidas, siguiendo ejemplos de jugadores que no solo en la cancha son admirables, sino también en la vida.
Sin duda, para los mexicanos el fútbol no sólo representa un hobbie sino también es una pasión que lleva la emoción de sentir el comienzo y el final de cada partido, ya sea en el estadio o desde la sala de su casa.