Por: Óscar Alejandro Segura Flores
Alumno de Ciencias de la Comunicación UCEM
Colaborador del Laboratorio de Periodismo UCEM
¿Será una casualidad que los países más desarrollados tengan los sistemas educativos de mejor calidad? Al parecer no. Anteriormente hablaba sobre la complacencia del mexicano y la necesidad de ver nuestra educación como una herramienta para formar un México más desarrollado y seguro. Dejaba la interrogativa al “aire” sobre qué es lo que hacen los países más avanzados que nosotros no estemos haciendo bien. Erradicar un problema que afecte a el bien común desde la raíz es un proceso largo y requiere ser estudiado meticulosamente. Puede resultar difícil, pero no es imposible y ¿por qué no echar un vistazo a lo que los otros han hecho? Reconozco que no puedo hablar de una homogeneidad entre países a nivel social, porque no la hay. Somos muy diferentes en toda la esfera, pero la experiencia de varios países desarrollados, que en su pasado no eran tan prósperos y tenían grandes problemas sociales, tal vez nos puedan enseñar bastantes cosas. En este texto quiero hacer una reflexión y recalcar sobre cómo la educación de calidad, en todos sus sentidos, es una clave muy importante para el progreso, pero esa calidad que México merece se ve ahogada por las inmensas redes de corrupción e impunidad que existen en el famoso término holístico: “sistema”, que ha muchos mexicanos les gusta usar.
Hace aproximadamente cuatro décadas, algunas de las potencias economías más grandes del mundo, tenían problemas y atrasos de distinta índole. Por ejemplo en Latinoamérica, un país como Brasil, tenía una producción manufacturera mucho mayor que la de Tailandia, Corea del Sur, China y Malasia juntas. Finlandia pasó de ser un país maderero a uno con el mejor sistema educativo del mundo, Singapur tuvo bastantes problemas por su territorio y se independizó apenas en 1965, es ahora el segundo país más competitivo a nivel mundial, China redujo increíblemente la pobreza hasta 77 millones, nosotros tenemos 55.3, la India puede parecer engañosa, si tu observas fotos de algunas de sus calles o edificios, verás que están en mal estado, sin embargo, es sin duda un gran exportador de ingenieros, técnicos y científicos altamente preparados y bilingües.

«FLISOL 2014 en la Prepa Próceres de la Educación, Chicoloapan, Estado de México, México» por Ccsaintseiya bajo la licencia CC BY-SA 3.0
No es una casualidad ni obra del destino que los países más desarrollados, como los que menciono anteriormente, tengan sistemas educativos de buena calidad, que dan resultados satisfactorios y forman niños y jóvenes excelentemente preparados para el campo laboral, que es demasiado competido hoy en día. Su gente es altamente competitiva, proactiva y tienen muy presente la cultura de la innovación y riesgo. Analicemos un ejemplo de esto:
Según datos de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (WIPO por sus siglas en inglés) de las 2.7 millones de solicitudes de patentes que se tramitaron en todo el mundo en 2014, 82% se registraron en China, Estados Unidos de América, Japón, República de Corea y la Oficina Europea de Patentes (EPO) 1 . A nivel mundial, América Latina y el Caribe representan sólo 2.4% de las solicitudes, mientras que Asia sostiene el 60%, América del Norte 22.9%, Europa 12.9%, Oceanía 1.3% y África 0.6% 2. En México se registraron 16135 solicitudes en 2015 ante el WIPO, de las cuales alrededor del 8% fueron llenadas por residentes y un 92% por no residentes 3. El Instituto Mexicano de la Propiedad industrial sólo otorgó 2464 patentes en el 2015, de esas, sólo 89 pertenecían a mexicanos, las demás eran de extranjeros 4.
Sin duda los países que generan más patentes, marcas comerciales, diseños industriales e investigadores en cualquier ámbito, le apostaron totalmente a la educación de calidad, a la ciencia y tecnología. Decidieron que si explotaban los talentos y facultades intelectuales de su gente, podrían lograr cosas impresionantes y posicionarse como una potencia. Singapur es un país relativamente “nuevo”, que no posee materias primas ¿qué hizo? Decidió colocar a la educación como su prioridad y herramienta de supervivencia. Tal como lo dijo el rector de la Universidad Nacional de Singapur, Tan Chorch Chuan en una entrevista que le concedió al periodista Andrés Oppenheimer: “Singapur no tiene recursos naturales, de manera que no podemos sobrevivir si no explotamos nuestro potencial humano”6. Los demás países que sí poseen comodities no se conformaron con eso, decidieron innovar, reinventarse y ser más productivos con ayuda de una educación de calidad, equitativa y global, que la adaptan a las necesidades de un mundo donde el trabajo mental, está sustituyendo al trabajo manual. Básicamente establecieron una base sólida en sus sistemas. Ellos, en comparación con nosotros, ahora pueden enfocarse más en solucionar obstáculos de menor magnitud como la pobreza, el desempleo, la inseguridad o cuestiones de salud, a través de diferentes estrategias. En México tenemos un problema de gran magnitud, que es el rezago educativo, y nos genera más trabas de grandes dimensiones, que simplemente no acaban y creo que es fácil explicar porqué: México ha hecho lo contrario a otros países desarrollados, se quieren atacar los grandes problemas rápidamente. Parece que se quisieran camuflar esos obstáculos, se busca resolver de inmediato con programas sociales, políticas públicas, planes, modificaciones de leyes, etc.; que no están mal, pero no resuelven del todo las problemáticas más amenazadoras y nos hacen más dependientes del gobierno. El hecho de modificar una ley o crear una reforma no significa que vaya a funcionar, se necesita el cumplimiento de ellas (ejecutarlas). Pero en México, donde predomina la impunidad y corrupción tanto de la ciudadanía, sector empresarial y los funcionarios públicos, resulta complicado que esto suceda, además de que los intereses personales predominan por encima de todo lo demás y las trabas que atrasan al país, como el rezago educativo, quedan en segundo plano. Entonces ¿qué hacen todos estos países que nosotros no estemos considerando? Creo que la respuesta es simple: le dan la importancia y relevancia necesaria a la educación, independientemente si hay o no corrupción en los sistemas o si hay fallas, y aunque es evidente que los gobiernos no pueden sólo enfocarse a esto, tienen muy claro que la formación es una clave maestra para transformar su entorno de acuerdo a sus necesidades. Creo que en México no se ha llegado a esta reflexión, por diversos motivos, que quisiera explicar en otro apartado. Seguimos permitiendo el ausentismo en clase, los maestros, en general, son simplemente trabajadores de la educación sin vocación, hay un uso inadecuado del presupuesto, hay escuelas fantasmas (escuelas que no existen y que sin embargo están registradas como tal) y desorden administrativo de los estados. Este último punto es muy importante: hoy en día hay maestros muertos o jubilados que siguen cobrando en las nóminas y ¿a dónde va ese dinero?¿Porqué algunos estados y sindicatos omiten el proceso de rendir cuentas? 7 Todo este tipo de cosas son todo un atentado hacia el progreso de un país y hasta ese nivel lo hemos permitido, en primero porque los grupos vulnerables o rezagados tienen una apertura de consciencia muy baja hacia estos temas, que tiene que ver con su entorno en donde se desarrollan y otro porque los grupos más acomodados piensan que no se ven afectados por esto y resultan apáticos ante la situación, reflejando un individualismo, que considero yo, destructivo. Puede que esto se de esta manera o simplemente por la complacencia del mexicano, de la cual hablaba en un artículo anterior.
No nos vendría mal que nos preocupáramos más por la educación de nuestros niños y jóvenes. No nada más en el plano académico, sino ver la educación como toda una construcción de conocimiento y valores para ponerlo al servicio de la sociedad. Si hay algo que es muy seguro es que para que un país avance exponencialmente en materia de innovación, economía, salud, investigación, ciencia y todo que ayude a mejorar la calidad de vida, se necesita de una buena formación. Se necesita gente altamente preparada y con ética, que laboren en esos ámbitos. Pero si México se ha enfocado en dar una educación informativa y no formativa, eso es una meta casi inalcanzable. Cuando digo formativa me refiero a toda una amalgama de enseñanza del conocimiento y valores, desde un enfoque innovador para renovar nuestro entorno. Pero analizamos: ¿Bajo qué modelo educativo se enseña en México, háblese de escuelas públicas o privadas, de la educación obligatoria? Por su puesto bajo la línea de la memorización de contenidos, que el alumno olvida en una semana y que finalmente no le favorece a la resolución de problemas, porque no se nos entrena para ser críticos y a cuestionar. También seguimos volteando a ver hacía el pasado, olvidando las competencias necesarias para un presente donde prevalece la economía del conocimiento. Si no se reforma nuestro sistema educativo, México seguirá produciendo empleados, en vez de emprendedores. Gente ordinaria dependiente que lidia con un entorno en constante cambio y que solamente la gente extraordinaria trasciende y se adapta porque tiene las capacidades para ello. Curiosamente, mucha de nuestra gente extraordinaria termina triunfando en el extranjero, en todos los ámbitos.

«Scootsbluff High School take 2015 MAA AMC 10/12» por Mathematical Association of America bajo la licencia CC BY-ND 2.0
Desde mi perspectiva, si se apostara más por la educación de calidad, en un futuro no tendríamos que recurrir a esas estrategias, que menciono anteriormente, para erradicar la pobreza, por ejemplo. Esto equivaldría a “matar dos pájaros de un tiro”: mejoras la calidad educativa y por lo tanto mejoras la calidad de vida ¿cuánto tiempo llevaría esto? Un tiempo considerable, probablemente sería un proceso de décadas. ¿Habría que preguntarse si es por esta la razón, por la cuál los gobiernos no apuestan a esta necesidad inmediata? ¿Porque saben que no habría inmediatez en resultados?
Lo que se tiene que hacer es dar más cobertura a la educación, pero con calidad, más acceso a ella no significa calidad. Para lograr eso se necesitan maestros preparados que enseñen realmente bajo la línea del aprendizaje, no de memorización o de encuadre hacia una calificación, sino proveerles herramientas necesarias para que tengan un postura analítica bien sólida ante las cosas y que el maestro sea simplemente un guía y no una figura de autoridad, que es como usualmente se les ve en las aulas. Al igual los planes de estudio, contenidos de libros de texto gratuitos, materiales didácticos, espacios recreativos, etc.; deberían a empezar a formar parte de una agenda de revisión. También las condiciones del alumno son de suma importancia ¿cómo va a estudiar un niño con el estomago vacío o en una escuela obsoleta en cuanto infraestructura y equipamiento? Todos estos tipos de obstáculos, identifico que vienen principalmente de dos fuentes: las escuelas que preparan a los maestros y todo el sistema de administración de los estados que se encargan de los presupuestos. Queda claro que uno de los retos más importantes para México en el siglo XXI es una cambio en el sistema educativo, por el simple hecho de que vivimos en la era del conocimiento. Los cambios difícilmente vienen desde arriba. Por lo tanto, sólo la exterioridad al “sistema” nos va a permitir darle la relevancia que se merecen estos tipos de temas, como lo es el derecho a una educación de calidad. Si no somos los ciudadanos los que empecemos a exigir ese derecho, nadie más lo hará. Por sencillas razones que vienen desde décadas atrás: los servidores públicos, en general, siempre han trabajado bajo redes de complicidad, corrupción, intereses económicos y de poder, y por su puesto la impunidad siempre los resguarda.
Finalmente, propongo 2 puntos, algunos ya discutidos por la opinión pública, pero que quiero recalcar.
- Para las escuelas públicas: tener una agenda independiente y oficial por escuela en donde padres de familia, alumnos, docentes y directivos detecten y planteen cuáles son sus necesidades próximas y las financien bajo un presupuesto asignado. Esto puede aplicar más a cuestiones de infraestructura y equipamiento. Primeramente, creo que esto nos ayudaría a que haya más transparencia en el uso del presupuesto público de la educación, ya que cierta parte se emplearía con base en las necesidades de cada escuela. Lo negativo es que se puede dar el caso en que los participantes de esta agenda no sean lo suficientemente capaces de analizar, optimizar o detectar a detalle las verdaderas necesidades. Para esto las propuestas tendrían que pasar a revisión por un comité de profesionales en educación, tecnologías, pedagogía, etc.; formado por alguna organización independiente y apartidista para que las aprueben. Básicamente esta idea parte de la premisa de la reforma educativa que nos dice que los padres de familia son corresponsales de la educación de sus hijos y tienen el derecho y la obligación de organizarse en cada escuela. Y en ese sentido las escuelas a fin de cuentas no son, literalmente, del gobierno, sino que son nuestras y por ende nuestra participación es importante para apoyar al mejoramiento de la calidad de la educación.
- En materia de comunicación: el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) ya está trabajando en cuestiones que tienen que ver con la detección del desorden administrativo de los estados (información incompleta y manipulada de las nóminas de los trabajadores de la educación) con evidencia documental. Y algo que llama mi atención es la necesidad inmediata del IMCO de llevar a la agenda pública el tema educativo y todas las irregularidades que se están dando en toda la República. Tal como lo expresa Alexandra Zapata, coordinadora del proyecto Mejora tu escuela: “El IMCO quiere que seamos muchos más los que estemos hablando del tema educativo, que la prensa nos ayude a esto, que los ciudadanos nos indignemos y que empecemos a meter presión social y política…”8 El IMCO no es el único que persigue este objetivo, hay muchos más. Por lo tanto, creo que evidentemente los medios de comunicación convencionales que conforman los oligopolios y duopolios de radio, televisión y prensa en México deberían exponer en mayor medida la presión social y todas las irregularidades. Considero difícil esto, porque no tenemos control de las agendas de los medios y ellos están en todo su derecho de hablar de lo que quieran y de quienes quieran. Aunque parezca una idea radical, a mi parecer los problemas más amenazadores deberían estar como prioridad en las agendas de los medios y en primeras planas todos los días para generar consciencia colectiva y amenazar la complacencia del mexicano. Por su puesto que las empresas de medios más populares no lo harán, porque los temas de sus agendas están adheridos a sus innegables acuerdos con los gobiernos y sus principales figuras. Veo difícil que expongan más este tipo de asuntos y no es que no hablen de ellos, porque en efecto lo hacen, pero muy poco. Actualmente, la mayoría de los medios de comunicación más convencionales le dan más peso y más dimensión a las fuentes de gobierno federal, estatal, municipal, partidos políticos, sindicatos oficiales, etc.; mientras que los asuntos del rezago educativo o la cuestión del mal uso del presupuesto para la educación están más descuidados y simplemente no están en nuestra mira. De esta manera, creo que la única alternativa que veo viable es el periodismo independiente y el uso de las nuevas tecnologías y sitios Web para exponer este tipo situaciones agravantes y organizarnos. Y por su puesto que ya se ha estado haciendo en los últimos años y ha tenido bastante éxito. Un claro ejemplo es la iniciativa ciudadana contra la corrupción en México, Ley 3de3, si no hubiera sido gracias a las redes sociales, donde se invitaba a la gente a que conocieran la iniciativa y firmaran, probablemente esta ley no hubiera llegado aún al Congreso. Por lo tanto, hay que aprovechar estos espacios, que aún no están regulados del todo. Campañas, peticiones, movimientos, etc.; por este medio es una excelente herramienta. En cuanto a la cuestión de la educación, probablemente una buena idea sería empezar a hacer campañas de consciencia colectiva sobre las trabas del sistema educativo entre varios íconos de la Web, como “youtubers” para que ayuden a transmitir las inconformidades o irregularidades en sus espacios para generar consciencia en la gente y presión, debido a su gran numero de seguidores. Lo positivo de esto, es que generando contenidos de manera independiente y utilizando la Web, no estamos atados a la censura, a una agenda o un poder que nos diga qué decir o que no o qué estrategias seguir para manipular a los receptores con información sobredimensionada o tratada de cierta forma para beneficiar a los de siempre.